La Meta de Mi Viaje
La meta de viaje…todavía no la conozco, pero cada día que pasa me conozco más, he adquirido mi coraje…
Cada día es un día para darse cuenta de algo: que me gusta mi trabajo, pero me gustaría hacer algo más, que estudio lo que me gusta, pero me gustaría hacer algo más, es una especie de insatisfacción constante. Mi cabeza no deja de crear, de pensar, quiere investigar, quiere leer, quiere pintar, quiere construir y ella quiere…pero yo también. Es una necesidad que no sé de dónde ha salido.
Quisiera convencerme que con decirme: “Soy así y punto” iba a dejar de psicoanalizarme, pero es una tontería, no puedo engañarme, pocas veces consigo auto engañarme, soy demasiado sincera –incluso conmigo misma- y he querido cambiar tantas veces…que lo cierto es que perdí la cuenta hace muchos años.
Cada día desayuno en una cafetería, mientras tomo mi café con leche, veo la gente pasar a través de los ventanales , y mientras les veo, organizo mi día, organizo mi vida, cada mañana nacen nuevos propósitos, nuevas objetivos, nuevas metas y siempre la pregunta. ¿Cuál es el porqué de esta continua actividad?
Y cada noche, adoro ponerme delante de portátil, poner mi música y ponerme a escribir en trance. A veces, me sorprendo de las cosas sobre las que escribo ya que, la mayoría de las veces, descubro que he exteriorizado algo que tenía en el subconsciente.
Me encanta ver las visitas de los blogs, y sólo el hecho de que haya una visita más hace que me sienta bien. Desde siempre me ha gustado recibir cartas, pero con esto de Internet, el correo tradicional tiene los días contados a pesar de que sigo escribiendo a algunos de mis amigos en papel. Supongo que esta es otra necesidad…Danimartin lo explicaba muy bien en su blog (no voy a ponerlo aquí por que no le he pedido permiso para hacerlo así que fiaros de mí) Necesitamos saber que los demás se acuerdan de nosotros.
Y llegado a este punto entiendo que la meta del viaje de cada uno de nosotros es dejar de necesitar a los demás, vivir y disfrutar de todo sin esperar nada a cambio. Como dice Ramiro (también en su blog): ser feliz, ser feliz, ser feliz….
Os diré algo: desde que tengo memoria si he tenido que pedir un deseo, pido siempre el mismo. Ser Feliz. Y lo cierto que la felicidad es un estado íntimo y personal, dura apenas cinco segundos de nuestros relojes y parece toda una eternidad cuando ese estado de gozo se produce; es una comunión entre lo divino y tú.
Esa es nuestra meta: ser felices. ¿Cúanto tiempo más vas quedarte quieto? ¡¡¡Corre hacia ella!!!
Yo Vencí a Ese Algo